Durante las fechas navideñas nuestra alimentación no es muy equilibrada. Las cenas y comidas abundantes, el exceso de carnes rojas, grasas saturadas y el consumo de alcohol, hacen que nuestro organismo, en particular el hígado, se resienta.
Además de recuperar nuestras sanas costumbres habituales, una pequeña cura tras estas fiestas nos ayudará a recuperar el equilibrio del organismo y eliminar las toxinas acumuladas.
Los consejos que debemos seguir son:
• Tomar 2 litros de agua al día. No sólo es una buena forma de hidratar al cuerpo si no una manera de ayudar a que el líquido retenido y las toxinas acumuladas se expulsen.
• Consumir fruta diariamente. Las uvas, son un gran remedio natural para la desintoxicación hepática. Los cítricos (naranjas, mandarinas, pomelos, etc) son los depurativos por excelencia, contienen altas cantidades de fibra soluble y ayudan al cuerpo a eliminar grasas y desechos tóxicos. La piña nos ayuda a eliminar los liquidos retenidos.
• Seguir una dieta depurativa:
- Consumir verduras crudas o cocinadas con poca sal, dándole prioridad a las alcachofas, cardo, cebollas, berenjena, escarola, rábanos y endibia.
- Preparar los alimentos al vapor, hervidos o a la plancha.
- Utilizar aceite de oliva en cantidades moderadas, lo que favorece un buen funcionamiento hepático
- Eliminar el consumo de productos refinados, la carne roja y los lácteos y derivados
- Consumir diariamente cereales integrales que aportan hidratos de carbono y vitaminas B y ensaladas que tienen acción depurativa, desintoxicante y diurética.
- No tomar alcohol durante estos días, y abstenerse en la medida de lo posible del tabaco.
• Podemos ayudarnos mediante la utilización de plantas o preparados depurativos a base de plantas. Entre estas plantas que nos ayudan a desintoxicar nuestro hígado y la vesícula biliar podemos encontrar: Cardo Mariano, Alcachofa, Diente de León, Boldo, Desmodium y Menta.
• Hacer algo de ejercicio, si puede ser por la mañana. Así activamos el cuerpo y la circulación sanguínea.
Aunque después de los excesos navideños es la época propicia para depurar nuestro organismo, cualquier época del año puede ser buena. No es necesario esperar a la aparición de síntomas para decidir hacer una limpieza interna, pero si sentimos fatiga, decaimiento, astenia, dificultad para conciliar el sueño, caída del cabello, uñas quebradizas, pérdida de apetito, o falta de energía en general, probablemente nuestro hígado nos está pidiendo auxilio.
